Propuesta de mejoramiento del ambiente educativo.
Descripción actual de la sala de clases
La sala cuenta con 25 mesas y sillas distribuidas en la parte delantera de la sala (ocupan solo la mitad de la sala), distribuidas en tres filas, un estante al lado izquierdo a la entrada de la sala el cual contiene la lista de útiles que se les piden a los niños (as) al inicio de año académico, un diario mural para colocar las efemérides de cada mes, un pizarrón blanco al frente y una mesa para el profesor en el rincón delantero de la sala, una biblioteca de aula en la parte trasera de la sala en medio de la sala, imágenes distribuidas por toda la sala como las vocales, el abecedario, los números.
Propuesta de mejoramiento del espacio educativo.
De acuerdo al resultado del diagnóstico realizado en el Colegio Centro Bíblico de la localidad de Melipilla, en el curso 1° Básico, el cual arrojo las variadas falencias que poseen los niños y niñas en el ámbito de los hábitos de convivencia que poseen dentro de la sala de clases, los cuales identifican que estos menores poseen un escaso nivel de convivencia, tomando también como evidencia los tres casos presentados anteriormente, la propuesta que se implementara para mejorar tanto la organización de la sala como también que los niños (as) aprendan a convivir entre ellos mismos que se implementara con ayuda de la profesora y de las dos asistentes que se encuentran en sala será: mejorar el ambiente físico de la sala (decoración y rincones)de clases con pancartas e imágenes alusivas tanto de las materias que ellos cursan como lenguaje, matemáticas, historia, ciencias naturales, religión, tecnología, artes, para dar respuesta a todas las dudas e interrogantes que puedan surgir en las clases, lo cual servirá para que los menores puedan desarrollar su autonomía la cual no se encuentra muy estimulada, un rincón con carteles y pancartas para el desarrollo de compromisos, autocuidado y respeto por sus pares indicando las normas o reglas que cada uno de los integrantes de la sala debe tener tanto los alumnos como los docentes que realicen sus clases en la sala. Las sillas que sobran se ocuparan para exponer trabajos realizados por los niños, la biblioteca de aula tendrá imágenes de los libros que poseen para la lectura de interés los cuales evidenciaran en donde debe ir cada libro, (su orden), los libros utilizados para trabajar en cada materia llevaran su nombre pegado en frente para que ellos puedan ubicar cada uno de estos textos, ir variando en la acomodación o distribución del mobiliario sacándole el mejor provecho al espacio que es bastante, un panel (diario mural)en donde se les mostrara noticias de interés y de actualidad nacional e internacional para adentrarlos en este ámbito del cual ellos están muy alejados, leerles estas noticias para que ellos se interesen en el tema.
Los niños se distribuirán de acuerdo a sus necesidades educativas, los alumnos que presentan mal comportamiento se ubicarán al frente de la sala para llamar su atención en las clases y evitar el desorden, los iniciales también se encontraran al frete de la sala, los intermedios al medio y los avanzados al final, los cuales podrán ir variando de acuerdo a sus avances.
Materiales en la mesa del profesor para cuando se necesiten (lápices mina, de colores, goma, sacapuntas) para los alumnos que no lleguen con sus materiales diarios. (lo cual ocurre en forma habitual).
Propuesta de organización del espacio físico.
Tomando como base la sala física descrita anteriormente y contemplando lo dispuesto en el plan de intervención, se propone:
Zonas de trabajo.
Se entiende por zona de trabajo, un espacio conscientemente destinado en el aula para que los alumnos realicen, en forma libre, responsable y autónoma, actividades que satisfagan su espíritu lúdico, investigativo y formativo. Esta forma de organización didáctica les permite explorar y despertar su creatividad, a la vez que fomenta la autonomía y la confianza en las propias capacidades.
Pared posterior de la sala: se propone disponer la siguiente división de espacios:
Biblioteca de aula
La biblioteca de aula corresponde a uno de los objetivos del plan de intervención, al igual que la zona de representación y drama y del arte.
El objetivo de la biblioteca de aula es que los alumnos se habitúen al uso de la biblioteca con fines recreativos, informativos y de educación permanente, abriendo un espacio en la sala de clases para el estudio, el descubrimiento, la autoformación y la lectura recreativa, fomentando la comunicación entre pares, favoreciendo la autonomía y la responsabilidad del alumno (Cristina Hejda, 2007). Para complementar este tema, visitar:
https://portal.educ.ar/debates/eid/docenteshoy/otras-publicaciones/la-biblioteca-del-aula.php
Espacio de la ciencia y Caja de los materiales para inventos:
Una caja de cartón o toneles de ropa americana, se irá llenando con cilindros de confort, tarros, tapas, botellitas plásticas, cajas de distintos tipos, cordeles, etc. Así se incentiva la creatividad, el reciclaje y, en forma práctica, se evita que falten materiales para todos cuando se realiza alguna actividad.
En lo posible se mantendrá en este espacio diferentes plantas cuidadas por los mismos alumnos en turnos semanas, la hoja de registro correspondiente (riego, crecimiento, posibles enfermedades, etc.) y un terrario con las mismas características.
Espacio del arte:
Hojas, cartulinas, témperas, revistas para recortar, diarios, restos de telas, plumas, semillas, mostacillas, etc. En este lugar, los niños encontrarán los materiales para realizar creaciones artísticas: dibujos, pinturas, collages, esculturas en papel maché, etc., experimentando con diversos materiales y desarrollando su expresión creativa.
Estante:
Primeros auxilios: botiquín de aula con parches curita, algodón, povidona y agua oxigenada, pinzas para sacar espinas.
Higiene: papel confort, toalla nova y jabón gel.
Junto al estante se dispondrá el Espacio de la música: una radio y una pequeña biblioteca musical. En lo posible: una guitarra, instrumentos de percusión que pueden hacer los mismos niños, metalófono, etc.
Cada lugar estará claramente identificado con letreros, de modo que los niños sepan a qué corresponde cada uno.
Esta estrategia contribuye al orden mental y, en forma práctica, a facilitar el orden después de cada actividad. Debe recordarse que los principios de orden y rutina son necesarios para la tranquilidad emocional de los niños, y que un espacio ordenado y limpio, favorece tanto el aprendizaje como la disciplina.
Propuesta de materiales.
R. H. Smith (1974) afirma que la elección y organización de los materiales para las distintas zonas de trabajo, así como la distribución de los alumnos, los colores y la decoración, tienen importantes repercusiones en el clima de aula, favoreciendo una mejor convivencia y un mejor trabajo diario. Lo que se busca es lograr un mayor bienestar general, una mayor sociabilidad y actividad.
Tomando en cuenta que los materiales específicos para cada zona ya han sido descritos, se considerará además:
Computador personal del profesor.
Lápices, reglas, hinchas de medir, lupas, papel lustre, hojas blancas, papel kraft, tijeras, pegamento, scotch, etc. dispuestos en el estante del profesor.
Con estos materiales se elaborarán los afiches y diarios murales de la decoración base: horario, lista del curso, calendario de cumpleaños, fechas importantes para la escuela y el año escolar, normativa interna de convivencia; y de la decoración flexible de la sala: programa de trabajo mensual, calendario de pruebas mensual, asistencia diaria.
Los materiales elaborados deben tener el tamaño adecuado para promover la interacción y discusión en torno a ellos.
Decoración de base:
Horario, lista del curso, calendario de cumpleaños, fechas importantes para la escuela y el año escolar, normativa interna de convivencia.
Decoración flexible:
Programa de trabajo mensual, calendario de pruebas mensual, asistencia diaria, exposición de trabajos.
Utilidad pedagógica de la nueva organización / Evidencias teóricas y prácticas.
Como ya se ha mencionado con anterioridad, el espacio y la distribución del mobiliario contribuyen a las relaciones interpersonales y favorecen (o limitan) el éxito de las situaciones de aprendizaje (Jaramillo, 2004). En este sentido, la propuesta de mejoramiento del ambiente educativo ha sido pensada y analizada en razón de cómo podría influir en la sensación de estabilidad y seguridad que los niños necesitan, en las relaciones entre pares, entre los niños y el profesor y entre el niño y los recursos dispuestos. Es decir, se ha buscado transformar el aula en un recurso de aprendizaje. Esto, tomando en cuenta el contexto rural en el cual se ubica la escuela y al cual pertenece la mayoría del alumnado, tomando en cuenta las necesidades, intereses y posibilidades del grupo (tanto en el sentido de proporcionar estímulos familiares y reconocibles –animales domésticos y salvajes, fiestas tradicionales, experiencias laborales de los padres y de los mismos alumnos, leyendas de la zona, etc.–, como la posibilidad de mostrar otras realidades lejanas a su experiencia cotidiana). Por otro lado, la propuesta busca romper con la asociación sala de clases-actividades rutinarias, repetitivas y monótonas.
En términos pedagógicos, la propuesta busca cumplir con los principios de actividad e individualidad a través de una disposición y organización del ambiente educativo que le permita constituirse en participante activo y el centro de la enseñanza. Específicamente:
A nivel conceptual (área cognitiva):
Acercar a los alumnos, en forma concreta y práctica, a los contenidos del nivel en todos los sectores de aprendizaje, de modo que exista continuidad y coherencia entre los contenidos tratados y los materiales de trabajo disponibles en el aula. Esta relación entre el niño y los objetos favorecerá la activación de sus conocimientos previos en torno a las temáticas tratadas y favorecerá el desarrollo del pensamiento divergente.
A nivel procedimental (desarrollo de habilidades):
La propuesta busca que el niños, en forma individual, en parejas o grupal, pueda poner en práctica los contenidos del nivel, ejercite sus habilidades con un sentido claro y, de esta forma, pueda ir construyendo aprendizajes significativos y profundos.
A nivel actitudinal (afectivo-social):
La propuesta favorece la interacción en un ambiente de trabajo que resulta a la vez lúdico e invita a la exploración. A través de esto se busca desarrollar actitudes que favorecen el aprendizaje: respeto por los demás, respeto y cuidado con los materiales que pertenecen a todos, autorregulación, responsabilidad personal y grupal, compromiso con el propio aprendizaje.
También busca que, a través de esta posibilidad de contar con estímulos diferentes y desafiantes, los niños vayan superando la intolerancia a la frustración, para que logren visualizar el error como parte importante de su aprendizaje. Esto, a través de la propia experimentación que hacen con los materiales disponibles.
Marco Para la Buena Enseñanza:
Dominio B: "Creación de un ambiente propicio para el aprendizaje". (1)
Este dominio se refiere al entorno del aprendizaje en su sentido más amplio; es decir al ambiente y clima que genera el docente, en el cual tienen lugar los procesos de enseñanza y aprendizaje. Este dominio adquiere relevancia, en cuanto se sabe que la calidad de los aprendizajes de los alumnos depende en gran medida de los componentes sociales, afectivos y materiales del aprendizaje.
En tal sentido, las expectativas del profesor/a sobre las posibilidades de aprendizaje y desarrollo de todos sus alumnos adquieren especial importancia, así como su tendencia a destacar y apoyarse en sus fortalezas, más que en sus debilidades, considerando y valorizando sus características, intereses y preocupaciones particulares y su potencial intelectual y humano.
Dentro de este dominio, se destaca el carácter de las interacciones que ocurren en el aula, tanto entre docentes y estudiantes, como de los alumnos entre sí. Los aprendizajes son favorecidos cuando ocurren en un clima de confianza, aceptación, equidad y respeto entre las personas y cuando se establecen y mantienen normas constructivas de comportamiento. También contribuye en este sentido la creación de un espacio de aprendizaje organizado y enriquecido, que invite a indagar, a compartir y a aprender.
Las habilidades involucradas en este dominio se demuestran principalmente en la existencia de un ambiente estimulante y un profundo compromiso del profesor con los aprendizajes y el desarrollo de sus estudiantes.
B1. Establece un clima de relaciones de aceptación, equidad, confianza, solidaridad y respeto.
Descriptores:
Establece un clima de relaciones interpersonales respetuosas y
empáticas con sus alumnos.
Proporciona a todos sus alumnos oportunidades de participación.
Promueve actitudes de compromiso y solidaridad entre los alumnos.
Crea un clima de respeto por las diferencias de género, culturales, étnicas y socio económicas.
B2. Manifiesta altas expectativas sobre las posibilidades de aprendizaje y desarrollo de todos sus alumnos.
Descriptores:
Presenta situaciones de aprendizaje desafiantes y apropiadas para sus alumnos.
Trasmite una motivación positiva por el aprendizaje, la indagación y la búsqueda.
Favorece el desarrollo de la autonomía de los alumnos en situaciones de aprendizaje.
Promueve un clima de esfuerzo y perseverancia para realizar trabajos de calidad.
B3. Establece y mantiene normas consistentes de convivencia en el aula.
Descriptores:
Establece normas de comportamiento que son conocidas y comprensibles para sus alumnos.
Las normas de comportamiento son congruentes con las necesidades de la enseñanza y con una convivencia armónica.
Utiliza estrategias para monitorear y abordar educativamente el cumplimiento de las normas de convivencia.
Genera respuestas asertivas y efectivas frente al quiebre de las normas de convivencia.
B4. Establece un ambiente organizado de trabajo y dispone los espacios y recursos en función de los aprendizajes.
Descriptores:
Utiliza estrategias para crear y mantener un ambiente organizado.
Estructura el espacio de manera flexible y coherente con las actividades de aprendizaje.
Utiliza recursos coherentes con las actividades de aprendizaje y facilita que los alumnos dispongan de ellos en forma oportuna.
(1) Ministerio de Educación. Marco Para la Buena Enseñanza, Santiago 2006.